Milán, una de las ciudades más de moda del mundo, no sólo lo es en términos de ropa y accesorios; la original mezcla de diversas tradiciones nacionales hacen que también sea una parte importante de la escena culinaria mundial.

Pero Milán es también uno de los bastiones más fuertes de la cocina tradicional italiana, donde auténticos elementos nacionales son todavía muy elogiados y apreciados. La cocina lombarda se basa principalmente en los productos más famosos de la región, que son los quesos, así como en un tipo de arroz característico de la región, que se utiliza como base para los deliciosos risottos del norte de Italia.

Si quieres probar algunos de los mejores platillos de la cocina milanesa, visita Cracco-Peck y prueba su chuleta de ternera empanada, risotto de azafrán, y delicioso tiramisú. Da Abele ofrece coloridos risottos de temporada, mientras que en el restaurante La Libera puedes degustar la ternera a la mostaza, o la creativa pasta con salsa de pescado.

Las pizzerías también abundan en la capital de Lombardía. En la bruschetta se puede ver el proceso de preparación de la pizza en un auténtico horno a leña, mientras que Le Briciole y Al Baitone poseen una impresionante lista de recetas originales. Quizás la pizzería más conocida sea Spontini, fundada en 1953 y famosa por su delicioso producto comercializado por porción.

A la hora del postre, es bueno recordar que Italia es famosa por sus excelentes helados, y que Milán cuenta con algunas de las heladerías más reputadas del país. Sin duda, se trata de un placer a base de frutas frescas, crema y chocolate que no querrás perderte. Escrito por Veronica.